La maldición de Miralis

La ciudad de Miralis se encuentra en una encrucijada peligrosa. Durante generaciones, su salida al suroeste fue la ruta principal para el comercio, la exploración y las caravanas diplomáticas. Sin embargo, en los últimos días, algo ha cambiado. Criaturas desconocidas de formas distorsionadas y ojos vacíos han comenzado a custodiar el paso, atacando a quienes se acercan sin piedad.

El ejército de Miralis, mermado por guerras pasadas y la falta de refuerzos, ha optado por no intervenir directamente. No pueden arriesgar lo poco que queda de sus fuerzas. Mientras tanto, comerciantes y mensajeros se ven obligados a tomar rutas alternativas: sendas más largas, montañosas y plagadas de peligros naturales y bandidos.

Aunque Miralis aún no está aislada, la tensión crece entre sus muros. El flujo lento de bienes, la falta de noticias claras y los rumores sobre los horrores que habitan el suroeste siembran incertidumbre entre la población. Se necesita ayuda... pero no cualquiera. Se buscan individuos capaces, lo suficientemente valientes o desesperados, para descubrir qué está ocurriendo, enfrentarlo y, si es posible, recuperar el camino perdido.

Ante todo, busco una mesa donde reine el respeto mutuo. Quiero jugadores que traten con amabilidad y empatía a todos los presentes, sin importar su experiencia, identidad o estilo de juego.

Me gusta ver a los personajes tomarse en serio: no significa que todo sea drama, pero sí que cada quien se esfuerce en interpretar, tomar decisiones desde el personaje y cuidar la coherencia narrativa. El metajuego está fuera de la mesa: prefiero que los personajes actúen desde lo que saben y sienten, no desde lo que el jugador conoce "desde afuera".

No soy un GM rígido con las reglas: para mí, las reglas están al servicio de la historia, no al revés. Pueden doblarse, cambiarse o ignorarse si la ficción lo amerita y si eso mejora la experiencia para todos. La improvisación y la creatividad son bienvenidas.

Lo único que no se negocia es el respeto y la disposición a construir una buena historia juntos. Si estás aquí para divertirte, comprometerte con tu personaje y aportar a una mesa sana, ya tienes un lugar.